miércoles, enero 12, 2011

JUGANDO A POLICÍAS Y LADRONES

Estábamos tomando unas cervezas
en la terraza del Bar Chiribí.
Había venido a pasar el fin de semana mi colega MG.
junto con unos amigos vascos.
Al machar hacia otro garito
a Ik. entrói el ramalazo y cogió una de las sillas
de cocacola que había en la terraza.

Unos guardia jurados del ayuntamiento
que en esa calle vigilaban una cochera
y de paso la movida
vieron la jugada
y se acercaron a pedir de malas maneras
que devolviera la silla.
Ik. se acojonó y trató de escapar torpemente
pero los gorilitas se abalanzaron sobre él con rapidez
sujetándolo pol cuello.

Acudimos a intentar separarlos
-Ik. se ahogaba.-
Hubo un forcejeo.
Unas gafas volaron.
El otro vigilante sacó su porra
y nervioso ante la situación
desenfundó su pistola apuntándonos a mí y a Oc.

Oc. gritó “Dispara si tienes cojones”.
“Se te va a caer el pelo, mamón” dije yo.
Numerosas personas presenciaban la escena
como si se tratase del rodaje de una película.
Al poco llegaron dos grilleras y dos coches de los
nacionales.
Se llevaron a Ik. detenido.
Nos tomaron los datos.

Hubo un juicio y el tema de la pistola quedó difuminado.
Veredicto para mí: 10000 pesetes de multa
por alteración del orden público
y este poema.
A Ik. 75000 pesetes pa pagar les gafes
de uno de los vigilantes nocturnos.

Sería otra historia si hubiese disparado
pero a estas alturas ya estaría más que enterrada.
David Suárez, "Suarón".